NO ENDUREZCAIS VUESTROS CORAZONES

INTRODUCCION:

UN CORAZON ENDURECIDO de una persona, es aquel que no tiene sensibilidad, clemencia, es áspero, imponente, rechaza oir las recomendaciones y la palabra de Dios, rechaza los consejos y quiere hacer lo que quiere y no lo que es verdadero, pasan por alto las peticiones de los demás, se llenan de odio, violencia, maldeciencia ; esta situación nos aparta de Dios, por la terquedad y se encierran en sus propios razonamientos. Esta palabra nos llama a que recapacitemos, si por algún motivo estamos endureciendo nuestros corazones, contra los demás, contra Dios al no escucharlo y creernos ser los más sabios, se origina principalmente por el orgullo, y la falta de humildad, mansedumbre y benignidad. Hoy el Espíritu Santo nos llama, para que escuchemos su voz, que nos volvamos a Dios, que no nos ocurra lo que le ocurrió a nuestros primeros padres, al pueblo de Israel, que por su dureza, terquedad, desobediencia, e incredulidad no entraron a la tierra prometida, pero Dios quiere que entremos a esa paz, a ese reposo con El, a esa bendición. Veamos:

SALMOS: Jehová nos habló.

81:10 Yo soyJehová tu Dios, que te hice huir de la tierra de Egipto; Abre tu boca, y la llenaré. 11- Pero mi pueblo no oyó mi voz, e  Israel no me quiso a mí. 12- Los dejé, por tanto, a la DUREZA DE SU CORAZON; caminaron en sus propios consejos.  

MARCOS: Jesús reprocha a los discípulos.

16:14 Finalmente se apareció a los once mismos, estando ellos sentados a la mesa, y les reprochó su incredulidad y DUREZA DE CORAZON, porque no habían creído a los que le habían visto resucitado.

LUCAS: Sed compasivos.

6:35 Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced el bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque el es benigno para con los ingratos y malos. 36- Ser, pues, compasivos, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.

ROMANOS:Advertencia contra los duros de corazón.

2:5 Pero por tu DUREZA DE CORAZON no arrepentido, atesoras para tí mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios.

HEBREOS: Somos participantes de Cristo.

3:7 Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: Si oyeréis hoy su voz. 8- NO ENDUREZCAIS VUESTROS CORAZONES, Como en la provocación, en el día de la tentación en el desierto, 9- Donde me tentaron vuestros padres; me probaron, y vieron mis obras cuarenta años.

10- A causa de lo cual me disgusté cintra esa generación, Y dije: Siempre andan vagando en su CORAZON, y no  han conocido mis caminos. 11- Por tanto, juré en mi ira: No entrará en mi reposo. 12- Mirad hermanos, que no haya en ninguno de vosotros CORAZON MALO de INCREDULIDAD para apartarse del Dios vivo; 13- antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de nosotros se ENDUREZCA por el engaño del . 14- Porque somos hechos PARTICIPANTES de Cristo, con tal que retengamos firme hasta el fín nuestra confianza del principio.

12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 15- Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados.

PROMESAS:

Si nosotros OIMOS la voz de Dios, hacemos caso a sus preceptos, leyes y ordenanzas, no vamos a ser ENDURECIDOS por el engaño del pecado, y la incredulidad, sino que vamos a ser compasivos, amadores, perdonadores, y misericordiosos, porque hemos abierto la puerta de nuestro corazón al Espíritu Santo de Dios para que nos moldee, y recibiemos gran galardón en el cielo.

REFLEXION:

Cómo está nuestro CORAZON ?

Hoy, es el día en que debemos ver, como están nuestros sentimientos hacia Dios, hacia nuestro prójimo, si hay heridas, ofensas, que no hemos perdonado, y ver cuál es la causa de nuestra incredulidad, para que la confesemos a Dios, y seamos sanados, y abandonar toda DUREZA DE CORAZON, que nos puede acarrear perder la gracia de Dios para nuestras vidas.  

OREMOS:

Padre, te bendecimos, te damos gracias, porque nos hablas, y nos consuelas, y tienes misericordia por nosotros, ayúdanos a ser también misericordiosos, no permitas que nuestros CORAZONES se ENDUREZCAN, contra tí y nuestro prójimo, ayuda a nuestra incredulidad, amargura, llénanos más y más hoy, para que alcancemos esa gracia tuya y perder, llegar a tu reposo, mira nuestra descendencia, hijos, nietos , familia, y los que leen este mensaje, para que todos nos volvamos a tí, te lo pedimos en el nombre de Jesús, para tu gloria y honra. Amén.