EL SANA A LOS QUEBRANTADOS DE CORAZON, Y VENDA SUS HERIDAS

INTRODUCCION:

QUEBRANTAMIENTO es dolor, pena de haberle fallado a Dios, es arrepentimiento e  identidad con Dios como hijo, en la biblia es la Actitud de disponerse a humilarse delante de Dios y procurar la humildad delante de El, para que nos perdone, nos exalte, nos sane, nos libere, y nos restaure; EL CORAZON es el Centro de la  Voluntad humana, de donde nacen nuestros pensamientos, Decisiones, Sentimientos, Disposiciones, Emociones, e Intelecto; Dios nos dotó de un CORAZON puro, de carne, lleno de Amor,  pero por causa del pecado, de las heridas del pasado, éste se ha endurecido, se ha trastornado, se ha vuelto violento, odioso, sin sensibilidad. HERIDA es una ofensa hecha a alguien por , abandono, traición, violación a otra persona, y que afectó su CORAZON.

Pero te tengo buenas noticias, si nosotros nos arrepentimos, y humillamos ante Dios, El nos  perdona y nos sana; La Salvación es inmediata, pero las HERIDAS del CORAZON es lo que mas afecta el alma del Ser humano, pues pueden durar mucho tiempo y pasar de generación a generación; Dios lo sabe pues asi fuímos diseñados por El, Dios nos salva, pero también nos quiere SANAR, pues la Salvación es integral, y decimos que las HERIDAS endurecen el corazón cuando no perdonamos al ofensor, y mantenemos recordando el mal que nos han hecho; es como una HERIDA física, el médico la sana y la cura, pero si la destapa y la raspa vuelve a sangrar, asi pasa con nuestro CORAZON, si no perdonamos o borramos ese mal, vamos a seguir trayéndolo al presente y recordando el mal que nos causó, y el resentimiento y odio van en aumento cada vez más,y LA HERIDA DEL CORAZON, es peor cada vez,  pues  así es la herida física . Veamos:

SALMOS:

34:18 Cercano está Jehová a los QUEBRANTADOS de CORAZON, Y salva a los contritos de espíritu. 19- Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.

51:17 Los sacrificios de Dios son el espíritu QUEBRANTADO; Al CORAZON contrito y humillado no despreciarás tú, Oh Dios.

147:3 EL SANA A LOS QUEBRANTADOS DE CORAZON, Y VENDA SUS HERIDAS. 4- El cuenta el número de las estrellas; A todas ellas llama por sus nombres. 5- grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; y su entendimiento es infinito. 6- Jehová exalta a los humildes, y humilla a los impíos hasta la tierra.

ISAIAS:

49:8 Así dijo Jehová: En tiempo aceptable te oí, y en el día de salvación te ayudé, y te guardaré, y te daré por pacto al pueblo, para que RESTAURES la tierra, para que heredes asoladas heredades.

57:15 Porque así dijo el Alto y sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo; Yo habito en la altura y la santidad, y con el QUEBRANTADO y humilde espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el CORAZON de los QUEBRANTADOS. 

61:1 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me UNGIO Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los QUEBRANTADOS DE CORAZON, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel.

ROMANOS:

2:5 Pero por tu DUREZA y por tu  CORAZON no arrepentido, atesoras para tí mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios. 

PROMESAS:

Si nosotros nos humillamos, nos arrepentimos, y nuestro corazón es contrito y humillado, Dios no nos despreciará, nos sanará y venda nuestra heridas, nos exalta, nos libra, y guarda y nos llama para ser restauradores asi como El nos restaura; pero si no buscamos de El, no perdonamos a los que nos ofenden, nuestro corazón se endurece, y Dios no puede entrar en nuestra vida, pues le cerramos las puertas y no permitimos que El gobierne nuestras vidas.

REFLEXION:

Cómo está tu CORAZON, Duro o Quebrantado ?

Hermanos, es bien importante que reconozcamos que hemos fallado a Dios, que perdonemos las HERIDAS que nos han ocasionado, para que Dios nos sane y restaure, recuerda que si Dios nos restaura, nosotros también debemos ser usados por El para restaurar a los demás, no para juzgar, ni criticar ni chismosear de nadie, debemos AMAR a nuestro prójimo, perdonándolo, y esta es la puerta para la fe y los demás dones espirituales.

OREMOS:

Padre, te bendecimos, te amamos te damos gracias, porque si nos humillamos ante tí, reconocemos nuestros errores y perdonamos a los demás, nos perdonas, sanas y restauras, hoy queremos pedirte perdón por nuestros pecados, nos humillamos y reconocemos nuestras debilidades, te encomendamos nuestros hijos, familias e iglesias en el nombre de Jesús. Amén.